29 de octubre. Faltan 4 dias para el aniversario y ya siento tu presencia. Los recuerdos asaltan mi mente. Esta vez, ya no duele. O al menos no tanto. Ya puedo recordarte con una sonrisa. Aunque al final acaben aflorando las lágrimas. Y la culpa. Esa siempre está ahí, aunque sé que no la tuve. Pero no dejo de dar vueltas a que quizás si mi decisión hubiese sido otra, tu destino hubiese sido otro. Cada vez que paseo por el muro, busco con la mirada la plaza donde me pediste el DNI. Si te hubieras quedado allí en vez de ir a comer con tu madre...Luego continuó en paseo recordando nuestras conversaciones, y me gusta llegar hasta el final a las rocas desde donde saltabas al mar. Qué loco estabas! Y esa locura tuya me encantaba. El paseo hacia el puerto me gusta continuarlo por el cerro. En algunos momentos echo en falta esa mano que me tendiste, que ya no tengo 19 y la falta de agilidad de va notando. La gente no entiende que prefiera ir por ahí a hacerlo cruzando la plaza. Pero a mi me acerca a ti. Me gusta ir por el Muro, quizás con la vana esperanza de encontrarte por allí y que todo esto no haya sido más que un mal sueño. Te siento tan cerca, que no sólo noto tu presencia, también noto tu roce sobre mi piel. Y aquí estoy, escribiéndote, con una sonrisa en la cara y las lágrimas aflorando mientras noto tu mano sobre mi mano ♥️