La enfermedad.

La “enfermedad” es un conflicto entre el programa mental de miedo y el alma. Cuando se hace insostenible, el cuerpo “grita” lo que la boca calla.

Cuando vibramos en baja frecuencia, el miedo lo ocupa todo y altera nuestra biología.

Llegados a ese punto, en el que no gestionamos nuestras emociones, el sistema inmune comienza a fallar, y, siguiendo el patrón de nuestro programa mental de miedo, comienza a atacarse a sí mismo. Pero antes de llegar a ese punto, tenemos señales que nos avisan que la “enfermedad” puede aparecer:

El resfriado “chorrea” cuando el cuerpo no llora.

El dolor de garganta “tapona” cuando no es posible comunicar las aflicciones.

El estómago “arde” cuando la rabia no se expresa ni gestiona. . La diabetes “invade” cuando la soledad duele.

El cuerpo “engorda” cuando la insatisfacción domina.

El dolor de cabeza “deprime” cuando las dudas aumentan.

El corazón “afloja” cuando el sentido de la vida termina.

El pecho “aprieta” cuando el orgullo esclaviza.

La presión “sube” cuando el miedo aprisiona.

Las neurosis “paralizan” cuando el heridas infantiles tiranizan.

La fiebre “calienta” cuando las defensas explotan las fronteras de la inmunidad.

Las rodillas “duelen” cuando tu orgullo no se doblega.

El cáncer “mata” cuando te cansas de vivir.

¿Y tus dolores callados? ¿Qué te están diciendo y aún no entiendes?

Deja de temer lo que sientes en tu cuerpo y empieza a escucharlo, a sentirlo, a identificarlo y a sanarlo. Ninguna medicina va a sanar lo que tú has CREADO, pues tu eres la medicina que necesitas. Los síntomas te avisan.

El cuerpo Habla.

Simón Stérn,